EDUCACIÓN INTEGRAL

Ing. Raúl López Muñoz
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estudiante de maestría del CIDETEC

Resumen

La educación integral es un derecho y un patrimonio de cada persona, de cada comunidad y de cada país, es una herramienta indispensable para lograr un progreso. Con ella se vencen y trascienden adversidades, limitaciones y miserias. Sin ella, no se puede transformar, evolucionar y humanizar cada persona y cada país.

I. Introducción

En el presente trabajo se expone la importancia de la educación integral como un medio de progreso tanto para el individuo como para la sociedad, y que se antepone a la forma tradicional de enseñanza que impera en la actualidad.

II. El problema

Si bien es cierto que en diversos países se han impulsado mecanismos para mejorar la enseñanza, en general la educación tradicional consiste en una figura de poder que dicta "verdades" las cuales deben ser memorizadas y en un futuro transmitidas a nuevos individuos, lo cual es un error ya que atenta contra un principio básico en la generación de conocimiento.

La educación no debe ser dogmática o reducirse a la transferencia de conocimientos, esencialmente debe renovarse y crear más conocimiento. La transferencia, repetición o dogma del conocimiento simplemente produce un estancamiento en el desarrollo humano y de las sociedades.

Una educación limitada, no es rentable ni para el individuo, ni para la sociedad ya que produce individuos fragmentados, por ejemplo: buenos estudiantes pero malos profesionistas, buenos profesionistas, pero malos padres, etc.

III. Casos de éxito

La neurociencia ha demostrado que las neuronas se conectan, se fortalecen y se expanden mejor en la infancia mediante la información y el razonamiento, es decir la creación del conocimiento.

La educación integral desde la infancia produce una inteligencia multifacética como la de Da Vinci, Galileo, Miguel Ángel, Aristóteles, entre otros.

Aristóteles quien, pese a diferir con varias ideas de su maestro Platón concordaba con el pensamiento de que “la inteligencia como el autodestino son una construcción consciente y sustentada, a veces con apoyo de una sociedad inteligente”. Esto significa que la inteligencia, la conciencia y la excelencia no son naturales, son resultado de un proceso constructivo humano.

IV. Educación Integral

Todo conocimiento debe fluir, aportar, evolucionar y crear algo nuevo, como lo hace la misma naturaleza y el universo. La diferencia es que la educación integral no está sujeta a la inercia natural o del cosmos, sino que, la debe planear y aplicar cada persona y cada comunidad por su misma necesidad de desarrollar capacidades humanas y progresar en todos órdenes.

La educación integral debe servir esencialmente a tres aspectos:

1. Dominio y trascendencia del ser.

La neurociencia, la biología, la psiquiatría, la psicología y filosofía han demostrado que cada persona nace fragmentada y enajenada, confunde su sentir con pensar, es contradictorio e incoherente, enajenado de múltiples formas (instintos, impulsos, patrones familiares, religiosos, modismos, apego irracional a los medios electrónicos, etc.); en síntesis, cada persona no es dueño de sí, es un recipiente inconsciente e irracional de su entorno.

2. Control y uso máximo del cerebro, despliegue de capacidades y potencialidades de cada sujeto.

La capacidad de pensar es algo que la naturaleza brindo al ser humano, pero pensar no es natural generalmente se confunde con el sentir, con el instinto. Para pensar se necesita información general como especializada, la cual a su vez debe ser cuestionada, analizada y experimentada.

3. Renovar y crear más conocimiento.

El conocimiento al igual que cada persona debe trascenderse con la solución de más interrogantes. Todo está interconectado, pero todo nos lo enseñan fragmentado, descontextualizado y dogmatizado lo cual impide la comprensión y renovación del conocimiento.

V. Conclusión

Por lo anterior, la educación requiere renovar tanto los mecanismos de enseñanza como el contenido de lo que se enseña, entrelazando la técnica con la cultura, se debe enseñar la matemática con la historia, la historia con la lengua, la lengua con poesía, la poesía con música, la música con psicología, la psicología con biología, integrar el individuo con el mundo.

VI. Agradecimientos

Agradezco de manera especial a la Dra. Magdalena Marciano Melchor quien me motivo para la realización de este trabajo, a mi amigo y colega el M. en C. Mario Cesar Maya Rodriguez quien en nuestras charlas acerca de la enseñanza terminó contribuyendo con diversas ideas expuestas en este texto, y al CIDETEC tanto como al CONACYT por el apoyo brindado para continuar mi formación como profesionista.

Referencias